Páginas

martes, 15 de octubre de 2013

Test Fujifilm X20 (Parte 1/2)




Poco sentido tiene realizar una prueba “tradicional” de esta FUJIFILM X20 más de 10 meses después de su lanzamiento. A estas alturas comparaciones “pixel2pixel” con sus competidoras de otras marcas o con su predecesora la X10 pululan por la red, las hay realmente buenas utilizando herramientas de test que permiten analizar técnicamente a la perfección esta X20.
Por eso cuando la X20 que me cedió FUJIFILM España llego a mis manos, tenía claro que haría MI PRUEBA.

Y eso es lo que vais a poder encontrar en esta entrada, la prueba que yo quería hacer a esta cámara para ver si podía tener hueco en mi equipo.
Creo que el plantearse adquirir esta X20 puede ser consecuencia de dos  tipos de necesidades:

-El contar con una primera cámara que ofrezca controles manuales
-El disponer de un equipo “all day”  que además me permita ser un equipo de respaldo y llegado el momento me saque de un apuro.

Esta segunda opción es la que motiva MI PRUEBA, y entiendo que aquellos que se acerquen a esta X20 como primera cámara seria la encontraran también útil… o eso espero.
SENSACIONES
No nos engañemos, una de las partes fundamentales a la hora de que un equipo te “llene” son las sensaciones que te transmite en el momento de usarse,  es lo que llamo las “sensaciones en el momento de fotografiar”.
Como en muchas otras cosas, la vista, el primer impacto es importante, y aunque objetivamente eso no tenga la menor importancia a la hora de fotografiar siempre ayuda un “envoltorio”  con personalidad. 


En este aspecto la X20 no tiene rival, bueno si, su predecesora la x10 a la cual haremos referencia en otro punto de esta entrada.  La estética de cámara de la vieja escuela que ya es signo distintivo de la serie X de FUJIFILM también caracteriza a esta X20. Personalmente este estilo me encanta, estéticamente se diferencia del resto de compactas y en mi caso me atrae más la versión en negro.

Una de las primeras cosas que llama la atención la primera vez que se coge la cámara es la sensación de solidez que transmite, y esto es consecuencia directa de los materiales y el tacto de la botonería. El acabado en símil piel y una disposición similar de los controles similar a las de sus hermanas mayores colaboran a transmitir la sensación de que estamos ante un producto PREMIUM. 
Quisiera hacer especial incapie en el tacto de los mandos. Este aspecto es uno de los que suele colaborar más en la llamada precepción de calidad. En este caso el acabado y sensaciones en las pulsaciones es similar a los que transmiten sus hermanas mayores X100 y X100s, las cuales quedan un pasito por detrás de los de la X-E1.

Mención aparte merece el dial de modos pero sobre todo el de compensación de la exposición. En ambos casos los mandos ofrecen la resistencia justa en su utilización y en el caso del dial de compensación de exposición, su ubicación me parece un acierto. A diferencia del primero, este dial esta al “incrustado” en el bloque que forma el cuerpo de la cámara. Uno de mis temores era precisamente que dadas las dimensiones compactas de esta cámara, es que el dial se encontrara a esa “altura” no facilitaría el agarre de la cámara sobre todo para manos grandes. Sin embargo precisamente esto “obliga” a que la mano tome la cámara y por la necesidad de tener que manejar este dial paste de la palma sirva de apoyo a la cámara. En este punto entra en juego la protuberancia a modo de “GRIP” que incluye la cámara. Siendo realistas, no, no es el mejor agarre del mundo, pero debemos tener en cuenta que estamos ante una compacta. Quizás una forma tan “simétrica” en pos de mantener la estética no juega a su favor. No obstante debo reconocer que es una de las mejores que he probado en el competido segmento de las compactas. Creo que con la utilización de una funda de cuero el agarre mejorará muchos enteros y no se echara de menos la ausencia de un grip como accesorio. Aunque para gustos los colores, en el caso de la X-Pro1 y muy especialmente de la X-E1, la utilización de las fundas de cuero, en mi opinión nos libera de tener que recurrir a los grip que se ofrecen como accesorio, eso sí a costa de perder acceso directo a la rosca del trípode.


Pero si hay un punto que dota de personalidad a esta X20 es su objetivo y la forma en la que este es responsable del encendido de la cámara. Como ya ocurría con su predecesora, la X20 empieza a “latir” al girar el zoom. El tacto metálico, la “suavidad-firme” del propio zoom es una autentica gozada. Si bien este sistema no es del gusto de todo el mundo, lo veo muy acertado ya que de incluir un botón al estilo de sus hermanas mayores, éste podría accionarse por error dado el tamaño del cuerpo que provocaría que quedara muy expuesto. Algo que al menos a mi me ocurre con bastante frecuencia en mi X-E1.
Ahora bien, es relacionado con el propio objetivo donde encuentro una de las “faltas” de esta cámara… y es la dichosa tapa del mismo.  Como idea de diseño es fantástica, una tapa de metal con el logo de FUJIFILM combina a la perfección con la filosofía de la cámara. Pero a la hora de la verdad es muy fácil perderla. Siempre puedes recurrir a uno de esos adhesivos y llevar colgando la misma, pero sinceramente desmerece a la cámara. Supongo que con cuidado no tienes por qué perderla, aunque podríamos preguntar a usuarios de la antigua X10 o de las x100 y X100s a ver qué opinan…
El otro punto negro en cuanto a construcción, hay que buscarlo en la base de la cámara. Si bien estamos rizando el rizo de nuevo, este es un detalle que comparte toda la serie X de FUJIFILM, y es la tapa de la batería y tarjetas. No es que este mal, simplemente es que no hace justicia al resto de la cámara. Su tacto, materiales, accionamiento… no sé exactamente el qué es, pero desde luego no están a la altura de una cámara que transmite calidad y solidez desde el momento mismo en el que la cogemos por primera vez.
Una vez me he “enamorado” de ella por fuera analizaremos su funcionamiento y rendimiento en condiciones reales. Eso será en la segunda y última parte de esta prueba


Puedes ver en acción a la X20 en este video

Continua AQUI

Agradecimiento a FUJIFILM España por la cesión del equipo.


Más información en la WEB oficial de FUJIFILM

Quizas te interese la prueba de la XQ1

3 comentarios:

  1. Yo también realicé una prueba de la x10 y x20 con el x-photographer Ignasi Raventós, y tanto los resultados como la sensación al fotografiar me "enamoraron". Podéis ver los resultados en el álbum Flickr (http://flic.kr/s/aHsjHZGpB3)

    ResponderEliminar
  2. Yo me hice con una X20 y estoy encantado. Aprovecho para felicitarte por tu blog. Solo haría una acotación: Usa una fuente más grande para las letras. Están muy pequeñas y dificulta la lectura. Un abrazo

    ResponderEliminar
  3. La verdad es que es una autentica gozada de maquina... Sobre tus comentarios sobre el blog, muchas gracias, y lo de la fuente lo tengo en cuenta para cuando le de una vuelta de cara al mismo. De nuevo gracias

    ResponderEliminar